Hoy, 22 de abril (jueves), a las 18:00 horas, en la Sala Natalia Sosa Ayala del Edificio Central de la Biblioteca Universitaria, tendrá lugar el libro fórum de la lectura 74 que será coordinado por Juana Rosa Suárez Robaina, profesora de didáctica de la lengua y la literatura en la ULPGC.
La asistencia se reconocerá con créditos presentando el carnécultural.
El autor de nuestra próxima lectura reivindica el poder de las palabras para hacer que emerja la mejor versión de las personas más anodinas en El lector del tren de las 6.27, una suerte de fábula surrealista aderezada con ternura y humor negro, que ha sido un éxito de ventas y se ha traducido a 25 idiomas.
Su protagonista, Guibrando Viñol, es un obrero de una planta de reciclaje de papel que ama los libros y está deprimido por una profesión que detesta: destruir libros al introducirlos en una máquina trituradora que se llama La Cosa.
Este desdichado personaje encuentra una solución provisional a su desconsuelo. Cada día regala 20 minutos de lectura en voz alta a los pasajeros del tren que une París con los suburbios, pueden se páginas sueltas de obras maestras como recetas de cocina. Al principio, «la lectura es impuesta a la gente» y al final «todos la acaban disfrutando» y, más allá de un homenaje a la lectura, la novela se convierte en «una declaración de amor a la palabra escrita y la palabra pronunciada», ha expresado Didierlaurent.
A su alrededor, aparecen los personajes más esperpénticos, como un guardia de seguridad que habla en verso alejandrino, una princesa cuyo palacio es un aseo público, su amigo mutilado, que hará lo imposible por encontrar sus piernas y, por supuesto, la máquina trituradora, que es el monstruo.
Jean-Paul Didierlaurent nació en los Vosgos (La Bresse, 1962).
Tras aprobar las pertinentes oposiciones, este escritor francés pasó toda su vida laboral en el servicio de atención al cliente de una conocida compañía nacional de telecomunicaciones. Fascinado por la escritura, en 1997 empezó a escribir novelas cortas, más o menos una por año, historias que enviaba a todo tipo de certámenes y que terminaban premiadas.
Entre ellas:
1997 : Le Jardin des étoiles y Procession (El jardín de las estrellas y Procesión)
1999 : Miroir d’encre (Espejo de tinta)
2000 : L’Autre y Marée noire (El otro y Marea negra)
2004 : L’Envol (El Vuelo)
2005 : Le liseur (El Lector)
2007 : Puntilla
2008 : Confession intime et Canicule (Confesión íntima y Canícula)
2009 : Sanctuaire (Santuario)
2010 : Brume (Bruma)
2012 : Mosquito
Pero su gran debut fue en el género novelístico con El lector del tren de las 6.27, que gozó en 2014 de un éxito inesperado: publicada por una pequeña editorial francesa, se convirtió en un verdadero fenómeno de ventas en Francia y fue muy alabada por la crítica, además de ser vendida a 36 países. Para escribirla pidió una excedencia de un mes sin sueldo, y ya cumplidos sus 50 años se retiró a Vauvert, un pueblecito del sur de Francia y allí se consagró para escribirla.
A ésta le siguen:
2017 : Le reste de leur vie (El resto de sus vidas)
2019 : Conversations avec mon nain de jardin (Conversaciones con mi enano de jardín)
Pese al gran éxito de crítica que está teniendo la recepción de El lector del tren de las 6.27, Jean-Paul Didierlaurent sigue trabajando en la compañía de teléfonos móviles, aunque admitió con su sentido del humor que «me siento como una Cenicienta masculina».
Recuerda, el librofórum será el 22 de abril en el Edificio Central de la Biblioteca Universitaria y estará coordinado por la profesora Juana Rosa Suárez Robaina.
Tienes tiempo para leerlo, así que ¡anímate a nuestra próxima cita!